Como una melodía

Como una melodía se escribió este libro

15 de mayo de 2015. Por: Mónica Quintero Restrepo.
En El Colombiano.

Juan Mario Sánchez Cuervo escribe a mano y luego lo pasa, también a mano, otras tres veces, porque le parece que la escritura es una labor de reescritura y porque escribir en computador lo bloquea. Él prefiere sus cuadernitos, sentir el papel. Así es más él.

Como una melodía es su más reciente novela. El protagonista es Ramón Restrepo, un hombre que existió, es de su familia, y alrededor de quien giran los otros personajes. Un hombre cotidiano que él trata de dibujar como una persona sencilla, que se hizo un gran empresario, que era optimista, y que también tenía sus defectos.

Fue un hecho que pasó hace diez años, que estuvo en su cabeza durante mucho tiempo y que él siempre quiso escribir, pero se demoró, al principio porque le parecía que había que darle la perspectiva del tiempo, distancia para contarla con tranquilidad, y después porque no le fluía. Lo que pasó hace un año y tres meses es que pudo llevarla al papel, que salió natural, tanto que la escribió en dos meses, escribiendo de 11:00 de la noche a 2:00 de la mañana.

Fue escritor en las noches y profesor en la mañana. Juan Mario estudió Español y Literatura y lo de profesor lo ha sido por unos 20 años. Como escritor ha publicado dos poemarios y una novela. Lo que tiene Como una melodía es que lo toca a él, directamente. Es parte de su historia.

Lo que cuenta es real, incluso aunque los hechos parezcan inverosímiles. En Colombia todo puede ocurrir, dice él, y cita a Fernando Vallejo sobre eso de que aquí pasan cosas increíbles. La estructura, lo quiso así, es de novela.

El título es de una canción, Sounds like a melody, del grupo alemán Alphaville, porque quedó impregnada de Ramón y también porque Juan Mario asocia canciones con ciertos momentos.

Además le interesaba lo bonito, tener la cadencia musical, pensar en un canto a la vida, y no en la tragedia.

Juan Mario es un escritor y un ser, se describe él, sui generis. “Soy un ser extraño que vivo solo”. Eso le da tiempo para escribir